Una muchacha monta un corcel imaginario y desea
que el sufrimiento pare y la equidad avance,
que el amor triunfe y el odio acabe,
que la muerte pierda y las pibas ganen.
Sobre una Verde Marea, Jimena jinetea
junto a sus hermanas que son muchas
y que el pueblo, al verlas juntas,
al fin escuche.
Esta batalla arrea al patriarcado
que necesita ser domado.
Que no haya más violencia anhela, y
que ninguna piba más aparezca muerta.
Sabe que no está sola y por eso pelea
para que la justicia al fin un día, venza.
Por las que ya no están y por las que no volverán
ya dijimos basta, ni una muerta más.
Sueña con un mundo más justo
donde ser mujer no dé miedo y sí gusto,
donde ser libre pueda, a la hora que ella quiera.
Y que el feminismo dome al patriarcado, aunque ella sabe,
que más que domado, necesita ser exterminado.
Jimena Haro